La revolución se debe hacer transfiriendo y compartiendo conciencia, no transfiriendo recursos

En medio del conflicto de guerra  que están aplicando contra la revolución, el Gobernador del estado Portuguesa, transfirió 35 millones 603 mil 774 bolívares a los circuitos comunales, para la ejecución de obras de interés social en los 14 municipios de la entidad.

Castro Soteldo expresó  que en este año se debe cerrar el círculo de circuitos comunales y pasar a la transformación de  verdaderas comunas productivas, tal como lo establece la esencia de la organización.

Dijo que la Gobernación ya no será el ente que  entregue recursos a los circuitos. Detalló que la nueva dinámica que se desarrollará, establece que la transferencia la hará de forma directa el Consejo Federal de Gobierno a las instituciones del poder popular.

Ratificó que el poder popular es el protagonista del momento histórico que se está viviendo en la actualidad. Por eso de forma permanente debe  seguir estudiando, organizándose y formándose  todos los días.

Aclaró que la Secretaría de Desarrollo Comunal va a conformar un esquema bajo otras vías  de transferencia de recursos a las comunas ya establecidas, al tiempo que prestará apoyo técnico para que las comunas sean realmente eficientes, lo que permitirá que la revolución sea irreversible.

Destacó que las élites financieras, cuando Nicolás Maduro pagó la deuda externa, les  “clavaron” un castigo a Venezuela, subiendo los puntos de riesgos, para que cuando el país vaya a solicitar un crédito a cualquier ente financiero que el imperio controla, lo intereses sean elevados.

Aseguró que el enemigo que mostró el rostro moreno, oscuro, de origen musulmán, de apellido Obama, es el que está castigando al pueblo. “Eso no es desde ahorita; eso viene desde hace muchos años, solo es que en la actualidad se hace visible”, develó.

Dijo que Chávez hizo que el monstruo aflorara, cuando comenzó a quitarle el dinero que es del pueblo. Remarcó que gracias a  la recuperación de los lingotes de oro, se han  consolidado más de seiscientas  mil viviendas.

Apuntó que la recuperación de los  lingotes trajo como consecuencia la construcción de más de siete mil 500 centros de salud. También el rescate   permitió que en Portuguesa se haya creado la  Red de Distribución de Alimentos (Redial), que hizo que de 13 kilos de pollos que se consumía percápita  hace 12 años,  hoy en día  se consuman 42. 4 kilos de pollos al año.

Dijo que a partir del próximo lunes  se comenzará la distribución de 18 millones de kilos de leche en polvo mensual, que permitirá que los niños y los abuelos puedan tener el alimento a la mano.

Sostuvo que gracias a la labor de la revolución, comenzarán  a llegar las primeras 10 mil cabezas de ganado, que serán controladas  y distribuidas  por el poder popular;  no solo con la participación especulativa, sino con el pueblo como controlador de la venta del alimento.

Enfatizó que la gentileza de recuperación del dólar petrolero y de los lingotes de oro, ha permitido que el pueblo tenga calidad de vida. “El enemigo perverso  está jugando a que el gobierno libere los precios, para que  el producto  sea vendido al precio del especulador, tal como están vendiendo el dólar en Colombia”, acusó.

Manifestó que la batalla no es contra la inflación;  la batalla es contra los ladrones que acaparan y especulan al pueblo. De esa manera  el monstruo  gigante que domina las empresas productoras de alimentos, le roba la plata al pueblo y le pone el precio del dólar que ellos prefieren.

Destacó que el pueblo debe saber el titánico esfuerzo que está haciendo la revolución. Por eso no se puede permitir que las bodegas que existen en los barrios, especulen y roben al consumidor.

Expresó que un verdadero revolucionario tiene la tarea, no solo de denunciar al enemigo, sino  combatir a los ladrones, combatir las colas y evitar que el revendedor robe al pueblo. “Nos quieren convertir en criminales”, acusó.

Aseguró que el capitalismo está empujando al pueblo a distanciarse del gobierno; se desilusione y termine siendo incapaz de preparar el porvenir. “Si nosotros nos quedamos contentos y conformes con lo que hicimos con nuestros recursos y no nos preparamos para la construcción de la verdadera patria socialista, estamos muertos”, remarcó.

Dijo que el pueblo venezolano y en especial el portugueseño, no puede caer en posiciones de  abulia, de marasmo y  apatía, que es compartida en las colas. Enfatizó que  la problemática no se debe  atacar a planazos, sino se debe resolver con conciencia humanista, con corazón cristiano, revolucionario y patriota. Aclaró que el pueblo cree que la revolución es aquella que  únicamente  transfiere  recursos; “no,  la revolución debe hacerse transfiriendo y compartiendo conciencia”.

Sostuvo que con  el pueblo consciente y organizado se librará la guerra que el imperialismo está planteando. Por eso se deben cumplir tres tareas fundamentales. La primera no hacer colas, la segunda no comprar los productos  revendido; y tercera,  se debe denunciar al que especula. Puntualizó que la conciencia, la movilización y la direccionalidad se deben tener presentes a cada momento.

Redial contra la guerra económico

El mandatario estadal afirmó que en la actualidad se está viviendo un periodo de guerra eminente, que pudiera conducir al poder popular a cometer actos vandálicos. Aseguró que existe gente revolucionaria que está apostando al quiebre de los logros que se han consolidado, gracias a la gestión de Castro Soteldo.

“A ellos les da dolor que Redial  se esté potenciado, que sea una experiencia en el ámbito nacional y que esté llegando a las distintas comunidades, garantizando los alimentos de primera necesidad”, expresó el mandatario.

Comunicó que se están haciendo las correspondientes articulaciones para que la   Red de Distribución y Comercialización de Alimentos (Redial) sea la empresa social  que distribuya todos los productos de higiene personal en el estado Portuguesa.

Dijo que se están reforzando los esfuerzos para que cada alcaldía tenga un centro de acopio, para luego, en conjunto con  las Unidades de Batalla y las organizaciones populares, crear  un bloque de distribución que salga a los barrios a llevar los productos de primera necesidad, los detergentes y los insumos de uso personal.